Alguna vez había tratado de explicar lo mucho que me fascina conocer gente nueva interesante,
en realidad, todos son interesantes, y sumergirte en la vida de personas que o forman parte de la tuya o están de paso, pero de todos se aprende.
Y ayer me volvió a ocurrir, si bien es cierto que los exámenes ocupan la mayoría de mi tiempo últimamente, no todo vale, y también hay que saber tener un espacio para tu recreo.
Un concierto especial, y como aperitivo la abuela de J, con su alegría, sabiduría y juventud, incongruencias de la vida... '¡Es cierto que tienes una mirada llena de vida!'
Gracias a ella recupero cinco minutos de colada y colada para intentar expresaros algo sencillo y mundano, como la vejez.
Te quiero Mamita C, no imaginas lo que te echo de menos!
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