Defenderé la casa de mi padre

Hoy tenía prevista otra entrada, pero desde que Antonio Parreño se tomó vacaciones no me había parado a ver el telediario...y la historia se repite.

Abarcaré un tema muy complejo de la manera más simple posible, (he prometido a mi padre que no me mojaré mucho), hablemos pues de Palestina.

Leyendo por internet se pueden leer cosas muy curiosas, pero lo del Nuevo Mundo Israelita se lleva la palma:

"El presidente de la autoridad Palestina, Mah­moud Abbas, quiere el reconocimiento de un Estado palestino sin conversaciones de paz con el Estado de Israel, apelando a la Asamblea Ge­neral de las Naciones Unidas.

El 11 de julio de 2009, el jefe de Política Ex­te­rior de la Unión Europea, Javier Solana, hizo un llamado al Consejo de Seguridad de la ONU pa­ra que reconociera un Estado palestino, in­clu­so si los israelíes y palestinos no alcanzan un acuer­do entre ellos. Como de costumbre, los ju­díos siempre somos los malos de la película, y cuan­do estornudamos ponemos en peligro la paz mundial.

Hagamos un poco de historia acerca del eter­no conflicto entre judíos y árabes. Después del 11 de septiembre de 2001, por fin el mundo des­pertó y se dio cuenta de que el terrorismo per­judica a todos por igual. Estados Unidos en­vió tropas y toda su tecnología a 20 mil ki­ló­me­tros de distancia a Afganistán, para buscar a los res­ponsables de los atentados del 11 de sep­tiem­bre. A Israel se le recrimina que haga lo mis­mo a algunos kilómetros de distancia de sus ciu­dades más pobladas.

Yo le preguntaría a todas las plañideras de tur­no qué harían en iguales circunstancias. ¿No de­fenderse y dejarse matar? ¿Eso es lo que quie­ren? Prefiero que digan: “Qué malos son los ju­díos” y no “Pobrecitos los judíos”."

Obviamente, no se acaba ahí, pero me quedo con la última frase...

Hagamos un símil, ¿qué pasaría si...

...el presidente de tu comunidad de vecinos un día viene con una familia que no tiene casa, que ha sido expulsada de diferentes casas por diversos motivos, y te dice que si podrías darle alojamiento temporalmente?

Hasta ahí todo bien, pero... ¿y si esa familia se empieza a apropiar de todo lo tuyo, y encima te arrincona y ni siquiera te deja bajar a por comida? La cosa se complica.

Se complica tanto que hasta en las juntas de vecinos no tienes silla, te quedas sin silla de propietario donde verás sentado al jefe de los nuevos 'inquilinos'.

Entonces, tú pides tu silla como está haciendo ahora Mahmoud Abbas, y la gente se escandaliza.

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¿¿¿¿¿¿POR QUÉ?????!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Creo que nunca lograré entenderlo.

Incluso el PREMIO NOBEL DE LA PAZ, te lanza una terrible amenaza por ello.

Y termino con una poesía de Gabriel Aresti, titulada NIRE AITAREN ETXEA:

Defenderé
la casa de mi padre.
Contra los lobos,
contra la sequía,
contra la usura,
contra la justicia,
defenderé
la casa
de mi padre.
Perderé
los ganados,
los huertos,
los pinares;
perderé
los intereses,
las rentas,
los dividendos,
pero defenderé la casa de mi padre.
Me quitarán las armas
y con las manos defenderé
la casa de mi padre;
me cortarán las manos
y con los brazos defenderé
la casa de mi padre;
me dejarán
sin brazos,
sin hombros
y sin pechos,
y con el alma defenderé
la casa de mi padre.
Me moriré,
se perderá mi alma,
se perderá mi prole,
pero la casa de mi padre
seguirá
en pie.

*